¿Quién subsidia a quién?
Puerto Madero y González Catán
Puerto Madero y González Catán
por Centro de Estudios Nacionales
El ministro y vicepresidente Boudou, autor del plan de recorte de subsidios, vive en el lujoso barrio Puerto Madero. Hay 170.000 habitantes de González Catán sin red de gas, usan garrafas. El gas en garrafas es tres veces más caro que el gas natural que usan Boudou y sus vecinos.
Boudou y sus vecinos usan calefones y estufas que funcionan con ese gas barato. Una familia trabajadora sin red de gas debe usar una bomba de agua con motor eléctrico, calefón eléctrico y estufas a garrafa o eléctricas. La boleta de electricidad y el gasto en garrafas, en invierno, se van a las nubes.
Boudou paga 66 centavos a Aysa el metro cúbico de agua y el uso de la red cloacal. Aysa trabaja a pérdida: recauda el 10% de lo que gasta y el Estado se hace cargo del 90% restante. Es decir, el Estado subsidia el 90% del consumo de Boudou y sus vecinos. Como la familia obrera no tiene cloacas, tiene que construir su pozo negro y mantenerlo usable por su cuenta.
Boudou y sus vecinos pagan aproximadamente $ 30 de impuesto al valor agregado (IVA) por sus consumos de electricidad, gas y agua. Una familia trabajadora sin redes de agua y gas, paga $ 180 de IVA por la electricidad y las garrafas.
Resumamos. Boudou pagaría de gas, electricidad y agua $ 150 (que incluyen impuestos por $ 25). Y la familia trabajadora del Gran Buenos Aires, sin redes de agua y de gas, por usar los mismos servicios que Boudou y sus vecinos, gastó, en invierno, $ 950 (incluyendo $ 184 de IVA de las garrafas y la electricidad).
El ministro y vicepresidente Boudou, autor del plan de recorte de subsidios, vive en el lujoso barrio Puerto Madero. Hay 170.000 habitantes de González Catán sin red de gas, usan garrafas. El gas en garrafas es tres veces más caro que el gas natural que usan Boudou y sus vecinos.
Boudou y sus vecinos usan calefones y estufas que funcionan con ese gas barato. Una familia trabajadora sin red de gas debe usar una bomba de agua con motor eléctrico, calefón eléctrico y estufas a garrafa o eléctricas. La boleta de electricidad y el gasto en garrafas, en invierno, se van a las nubes.
Boudou paga 66 centavos a Aysa el metro cúbico de agua y el uso de la red cloacal. Aysa trabaja a pérdida: recauda el 10% de lo que gasta y el Estado se hace cargo del 90% restante. Es decir, el Estado subsidia el 90% del consumo de Boudou y sus vecinos. Como la familia obrera no tiene cloacas, tiene que construir su pozo negro y mantenerlo usable por su cuenta.
Boudou y sus vecinos pagan aproximadamente $ 30 de impuesto al valor agregado (IVA) por sus consumos de electricidad, gas y agua. Una familia trabajadora sin redes de agua y gas, paga $ 180 de IVA por la electricidad y las garrafas.
Resumamos. Boudou pagaría de gas, electricidad y agua $ 150 (que incluyen impuestos por $ 25). Y la familia trabajadora del Gran Buenos Aires, sin redes de agua y de gas, por usar los mismos servicios que Boudou y sus vecinos, gastó, en invierno, $ 950 (incluyendo $ 184 de IVA de las garrafas y la electricidad).
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