Chaco. Denuncian pésimas condiciones de vida en Sáenz Peña: “Ninguna persona puede vivir así; es la precariedad total”

Así lo advirtió Roberto Mena, de la Defensoría del Pueblo de la Nación. Dijo que 10 mil personas están viviendo en pésimas condiciones en distintos barrios aborígenes de Sáenz Peña. Pidió la intervención de los Estados nacional, provincial y municipal.

El abogado Roberto Mena, de la Defensoría del Pueblo de la Nación, alert
ó sobre las paupérrimas condiciones de vida que sufren unas 10 mil personas pertenecientes a comunidades aborígenes que viven en barrios alejados de Sáenz Peña. Becas que no se cobran hace más de dos años y falta de viviendas dignas, las principales falencias. “En ese lugar se ve mucha miseria, realmente”, lamentó Mena.

Lapidarias fueron las conclusiones a las que arribaron los representantes de la Defensoría las cuales fueron plasmadas en el informe socio, sanitario y ambiental que remitió al defensor del Pueblo de la Nación la oficina Chaco a cargo de Mena, en el que se refleja la realidad de doce barrios de Sáenz Peña en los que residen niños, jóvenes, adultos y ancianos aborígenes, en su mayoría del pueblo qom.


Las comunidades se habían reunido en el barrio Pablo VI, el 8 de octubre, con Mena; con el trabajador social Martín Ulibarrie, representando a la Dirección de Salud Indígena del Ministerio de Salud Pública y con Miguel Alejandro Armoa, abogado de DDHH del foro local. La delegación realizó una inspección y relevamiento de la situación de los barrios, emitiéndose un informe inicial que será ampliado y replicado en otras localidades del interior provincial.


En declaraciones a Radio Planeta, Mena recordó que estas denuncias y la posterior visita a la zona se dio a principios de octubre, luego de que un grupo de vecinos de Sáenz Peña, en su mayoría indígenas encabezaran una manifestación frente a la municipalidad reclamando mejoras en su zona.

“Llegamos al lugar, logramos destrabar el conflicto, que el intendente los atienda y que se comprometiera a la regularización de tierras, a la fumigación para eliminar vinchucas y otros insectos. Además me comprometí a bajar a los barrios para escuchar las diferentes inquietudes de los delegados”, comentó Mena.

Ranchitos

“Cuando bajamos al barrio Sexto, la situación no se condice con los parámetros de calidad de vida que deberían tener. Hay ranchitos, y una categoría más bajas de ranchitos que son los de plástico. Realmente una miseria, se ve mucha miseria ahí. Hay una ausencia de una política de Estado por parte de los tres estados: nacional, provincial y municipal”, lamentó el abogado.

Mena desglosó varias de las falencias que se detectaron en el lugar. “Con respecto al Estado nacional, hemos detectado 120 becas de nivel primario, 240 becas del nivel secundario que no se pagan desde 2009. Que son becas del plan inclusión del Ministerio de Educación de la Nación. En cuanto a las políticas de viviendas de la provincia, es deficitaria. La política municipal también es deficitaria porque no hay una urbanización adecuada y hay barrios postergados en Sáenz Peña”, señaló.


“Esto requiere un plan integral de los tres Estados y que los funcionarios bajen con equipos. Esto no es difícil de corregir porque estamos hablando de acceso a la escolaridad. El Ministerio de Educación tiene que relevar e incluir a los niños en los colegios. Hay reclamos por discriminación, hay déficit de políticas alimentarias”, sostuvo Mena.

“Estamos hablando aproximadamente de 10 mil personas. Van de ‘un poco mejor’ a lo pésimo. Trabajamos en doce barrios aborígenes que comienzan al costado de la ruta, en intersección de la vía”, explicó el abogado. Y advirtió: “Hay un contraste muy grande entre lo que es superávit fiscal y déficit social. Ahora con este informe van a comenzar las justificaciones pero cuando la gente reclama y se ve como se vive yo le creo a la gente. Ningún funcionario ni ninguna persona que nosotros conocemos pueden vivir así. Es la precariedad total”, graficó Mena.